Seleccionar el aceite adecuado para un motor diésel es fundamental para garantizar el rendimiento óptimo y prolongar la vida útil del motor, además de mantener la eficiencia del combustible en el mejor nivel. Los motores de tipo diésel cuentan con requisitos específicos de lubricación debido a sus altas temperaturas de funcionamiento y la mayor presión en comparación con los motores comunes de gasolina. Algunos factores importantes de conocer para saber cómo seleccionar aceites para motores diésel y cómo elegir el producto adecuado para tus necesidades y las del vehículo.
1. Viscosidad del aceite: La viscosidad del aceite es uno de los factores más importantes a tener en cuenta al seleccionar un lubricante para un motor diésel. La viscosidad se refiere a la capacidad del aceite para fluir a diferentes temperaturas, y se clasifica en grados de viscosidad, como 10W-30 o 15W-40. Los motores diésel suelen requerir aceites con una viscosidad más alta para proteger las partes móviles del motor bajo altas temperaturas y presiones. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo en cuanto a la viscosidad del aceite para garantizar un rendimiento óptimo.
La letra “W” en las etiquetas es la inicial de “Winter” o “invierno”, en español. La escala de viscosidad va desde 0W a 60W, subiendo al aceite más espeso. Por ejemplo, en el caso de un aceite de tipo 10W-30, lo que significa esto es que tiene una clasificación de 10W cuando el motor está frío y de 30 cuando se calienta.
2. Calidad y especificaciones del aceite: Es crucial seleccionar aceites de alta calidad que cumplan con las especificaciones y estándares de la industria. Busca aceites que cumplan con las especificaciones recomendadas por el fabricante del vehículo, como API (American Petroleum Institute) o ACEA (European Automobile Manufacturers' Association). Estas especificaciones indican que el aceite ha sido probado y certificado para cumplir con los estándares de rendimiento y calidad ideales para el motor.
3. Resistencia a la degradación térmica y oxidativa: Los motores diésel operan a temperaturas más altas que los motores de gasolina, lo que puede provocar la degradación térmica y oxidativa del aceite lubricante de manera más rápida. Busca aceites diseñados para resistir altas temperaturas y proteger el motor contra la oxidación y la formación de depósitos. Los aceites sintéticos suelen ofrecer una mejor resistencia a la degradación térmica y oxidativa que los aceites convencionales.
4. Propiedades de limpieza y protección: Selecciona aceites que contengan aditivos detergentes y dispersantes para mantener limpio el motor y protegerlo contra la acumulación de lodos y residuos. Estos aditivos ayudan a mantener las partes móviles del motor lubricadas y protegidas contra el desgaste y la corrosión. Además, busca aceites que contengan aditivos anti desgaste y de protección contra la corrosión para prolongar la vida útil del motor.
5. Compatibilidad con sistemas de tratamiento de gases de escape: Algunos motores diésel modernos están equipados con sistemas de tratamiento de gases de escape, como filtros de partículas diésel (DPF) y sistemas de reducción catalítica selectiva (SCR). Es importante seleccionar aceites que sean compatibles con estos sistemas y que no interfieran con su funcionamiento. Consulta las especificaciones del fabricante del vehículo para asegurarte de elegir un aceite adecuado que no cause problemas con los sistemas de emisiones.
Estos sistemas de tratamientos de gases de escape son los encargados de controlar y minimizar los niveles de gases emitidos a la atmosfera mientras sucede la combustión en un vehículo.
6. Consideraciones de uso y condiciones de operación: Ten en cuenta las condiciones de uso y las condiciones de operación del vehículo al seleccionar el aceite adecuado. Si conduces en condiciones extremas, como temperaturas extremadamente frías o calientes, carga pesada o remolque, es posible que necesites un aceite con una viscosidad más alta y aditivos adicionales para proteger el motor. Esta información puede ser verificada en el manual de instrucciones del vehículo o con un profesional.
Escoger el aceite adecuado para un motor diésel es crucial para garantizar un rendimiento óptimo y una vida útil prolongada del motor. Considera factores como la viscosidad del aceite, la calidad y las especificaciones, la resistencia a la degradación térmica y oxidativa, las propiedades de limpieza y protección, la compatibilidad con sistemas de tratamiento de gases de escape y las condiciones de uso y operación del vehículo al elegir un lubricante. Consulta siempre las recomendaciones del fabricante del vehículo y utiliza aceites de alta calidad que cumplan con los estándares de la industria para garantizar un funcionamiento seguro y confiable del motor diésel de tu vehículo.